Hay un punto en la geografía en el norte de nuestro término municipal en el que confluyen dos importantes proyectos de infraestructuras básicas que afectan profundamente el territorio. Ya comentamos de pasada cual iba a ser el itinerario previsible del AVE.
A partir de la salida del túnel que atraviesa el Pico del Pantano, discurre en paralelo al Barranc de la Barbassena. Solo unos cuantos metros más arriba, se está construyendo el embalse de la SAT San Enrique, receptor y distribuidor de las aguas del trasvase Jucar-Vinalopó en la comarca. Obviamente es una gran infraestructura puntual equiparable por su envergadura y repercusiones al AVE, y así se manifiesta por lo que después veremos. El barranco era y sigue siendo en lo que ha quedado (el ramal principal) uno de esos rincones escondidos que valen la pena. Algunas veces me he metido entre sus paredes, siempre una vez pasada la época de caza porque hasta este año era uno de los lugares acotados por la sociedad local de cazadores para soltar animales, dejarlos reproducirse y después matarlos, así que a principios del otoño y hasta el final de la veda es preferible no acercarse por allí. Fuera de esa infausta temporada el barranco contiene rincones cuando menos curiosos. Hay lugares que almacenan agua a lo largo de todo el año y épocas en los que un hilo discurre en buena parte de su recorrido casi hasta el Hondo, donde aporta su caudal tras cada lluvia siendo una de las escasas aportaciones de agua dulce y limpia al mismo. Si mi memoria no me falla hay algunos artículos de difusión publicados en el diario Información de hace algunos años, recogiendo precisamente una tesis o trabajo de investigación universitaria, que estoy en proceso de búsqueda.
En resumen tenemos tres elementos interesantes en apenas unos cuantos metros de diferencia: el Embalse de la SAT San Enrique, el trazado del AVE y el Barranco.
El embalse, cuando esté terminado será el más importante del término municipal por su capacidad (400.000 m3 ). Y se ha construido sobre un ramal secundario del barranco de la Barbassena, como más adelante veremos. En estos momentos solo es visible el vaso, prácticamente terminado según se puede observar;. Queda pendiente, previsiblemente, un importante aparato de ingeniería con motores de elevación y tuberías que conectarán el embalse de Villena con este, además de las tuberías de salida. Después de lo publicado en entradas anteriores sobre la problemática del Campo de Elche, es obvio que la infraestructura en ciernes es de una importancia vital para el futuro de la comarca y de la ciudad; sin embargo toca uno de las partes del término que quedaba relativamente libre de las excavadoras, asfalto, vertidos de tierras, etc.
