De nuevo una excepción a la temática habitual del blog, pero es que hay que ser permeable a las cosas que pasan alrededor de uno. A veces recibo mensajes de correo de difusión masiva a través de alguien que me tiene puesto en su libreta de direcciones. Afortunadamente ya saben que no participo en ninguna cadena; ni abro ni envío ese tipo de mensajes por motivos relacionados con mi intimidad: dicen que casi todos llevan algún programita recopilador de direcciones asociado al reenvío masivo, así que recibo pocos pero casi siempre son interesantes. Y como reflexión añadida tanto de lo que acabo de decir como del mensaje que reproduzco, la facilidad con que el mundo de la información nos coloca en el bando perdedor, o sea el de los que pagan. El mensaje que recibí enviado correctamente (es decir sin formar parte de una de esas cadenas, pero todo parece indicar que es uno de esos) aunque desprovisto de tipografía y diseño, no tiene desperdicio y viene avalado por la frecuencia con que oigo cosas similares en mi entorno (por aquello de los hijos, los amigos de los hijos...), y creo que en el entorno de todos. Aquí va:
Si solicitas una melodía para tu teléfono móvil mandando un mensaje SMS a un número de 4 cifras (ahora de 5 cifras), la descarga cuesta 1,20 Euros por minuto, pero ...... como la descarga dura dos minutos serán entonces 2,40 Euros.
Resultado:
Tu factura mensual asciende de repente a 100 Euros más de lo que solías pagar normalmente.
Explicación:
Resulta que al decir "alta" a... lo que deseas (descargarte la melodía), te estás dando también de alta SIN TÚ SABERLO a una serie de contratos para que manden a tu número continuos mensajes SMS de publicidad.
Lo mejor de todo es que todos y cada uno de estos mensajes son a cobro revertido, se cargan a tu cuenta aunque tú no abras ninguno o los destruyas sin abrir.
Es decir, que si te mandan, por ejemplo, diez SMS al día, a razón de 0,30 céntimos cada uno, estás pagando 3 Euros diarios por una cosa que no necesitas, que no has pedido y que no sabes de dónde sale. Multiplica eso por 30 días que tiene el mes y verás lo que sube...
Colofón grandioso
Cuando vas a tu compañía a decirles que paren, bloqueen o filtren esa invasión indeseable te dicen que
¡¡¡NO PUEDEN HACER NADA!!!
Ni Telefónica, ni Yoigo, ni Vodafone, ni Orange.
ninguna compañía puede impedirlo; has sido tú, por pardillo, quien se ha metido en el fregado.
¿Dónde está el impedimento?
Muy fácil. Si quien remite esos SMS es, por ejemplo, el número 5559, tú mandas un SMS a ese número que diga "BAJA 5559", y efectivamente, ese número no vuelve a mandarte nada.
Pero, ¡oh, sorpresa!,
al mes siguiente el mismo timador te vuelve a mandar otro montón de SMS a tu costa pero ahora con el número 7784. Y si "matas" ese número, al siguiente mes el remitente es el 4593. y así hasta el infinito.
La gracia es que no puedes demandar a nadie, porque no hay nadie que figure como titular de los mencionados 5559, 7784, 4593, etc.
Reflexión importante:
Tampoco hay que olvidar que ninguna compañía telefónica se esfuerza NADA DE NADA en parar ese timo porque a ellas, como intermediarias que son en el tráfico telefónico que facturan, el timo les proporciona unas magníficas ganancias; o sea que tienen un morro que se lo pisan, dicho sea de paso.
Me cuesta creer que con los abrumadores medios tecnológicos de hoy en día sea "imposible" descubrir y eliminar a esos timadores ocultos.
Será imposible para un usuario corriente, ¿pero para una empresa con cara y ojos a nivel profesional?
Solución: No queda otra que darse de baja de tu número y abrir otro nuevo. Lo cual tampoco es gratis.
Enseñanza moral: (si la hay)
Lo mejor es escarmentar en cabeza ajena y no hacer ninguna operación ni con el móvil ni con el fijo que represente participar en concursos, beneficiarse de gangas, incorporar utilidades infográficas, insertar audio, etc.
Incluso eso tan inocuo que aparece en la pantalla de la TV en pleno partido de fútbol diciendo
"Manda antes del final del encuentro un mensaje de móvil al nº ... diciendo tal y tal cosa y ganarás un magnífico coche del modelo ...",
incluso eso es un sacadineros peligrosísimo.
Avisados quedáis, porque quien primero os va a dejar tirados es vuestra propia compañía de teléfonos.
Que un cráter lunar se llame Perito en Lunas Miguel Hernández
[...]y viene avalado por la frecuencia con que oigo cosas similares en mi entorno (por aquello de los hijos, los amigos de los hijos...), y creo que en el entorno de todos. [...]
ResponderEliminarTe has pasao con lo de los hijos ¡¡Que ya no tenemos 15 añicos!! jajaja
AAE, si te fijas no he dicho mis hijos, sino mi entorno, o sea que podría estar refiriéndome a los hijos de mi hermana, o los hijos de un compañero de trabajo por poner un ejemplo.
ResponderEliminarAl final metemos nosotros mismos el enemigo en casa. Adéu...
ResponderEliminarDespues de comentar en el blog me entero que, mi hermano (ójo al dato) de 50 años a "caido"y cada semana tiene dos como minimo y no encuentra modo de librarse. toma nota, AAE. adéu...
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