Parece que fue ayer pero ha pasado un año desde que emprendí la publicación del blog. Buena ocasión para mirarme el ombligo con cierta perspectiva.
Resulta que hay algo más de 80 artículos de interés diverso (todo hay que decirlo) pero visitables, creo. El conjunto temático resulta poco coherente (que le vamos a hacer si uno es así de disperso), una especie de cajón desastre que en contrapartida puede atraer puntualmente a gente llevada por intereses concretos; en definitiva se trata de los temas que me gustan: la bibliografía local (me he ceñido a lo digital, para hacer el campo abarcable por una sola persona sin renunciar a hacer incursiones sobre el material impreso o las “autoridades” locales); el comentario de novelas, en especial las de ciencia ficción como recurso para paliar la ausencia de cyberdark; el libro, la imprenta y la cultura digital, aspecto en el que para mi sorpresa apenas he entrado. Y para terminar reflexiones personales alrededor de la política local.
El conjunto, sin diferir demasiado de lo propuesto contiene algunos elementos dignos de ser pensados: la presentación de noticias bibliográficas digitales eclipsa un hecho trascendental: nuestra ciudad ya produce un número significativamente alto de libros interesantes, aunque solo sea por la dinámica propia de las instituciones culturales locales (Ayuntamiento, Universidades...). Si el objetivo fuese hacer un seguimiento sistemático (lectura anotada, análisis de aportaciones y redacción de un comentario “como Dios manda”) tendría que dedicarme casi en exlusividad a ello, abandonando actividades menos enriquecedoras pero más placenteras como la lectura por diversión, por ejemplo. No obstante van quedando en el tintero obras y personas que debería haber citado. Y no me conformo, así que aunque sea a destiempo...
En la recopilación de material de interés local, sin pretenderlo me ha salido la vena reivindicativa desde la perspectiva de “defensa del territorio”, lo que para mí es un retorno a planteamientos de la década de los 70. Algo habrá que hacer porque si realmente quisiera volver a intervenir lo haría de otra forma, en otros ámbitos y con otros postulados.
Finalmente es casi seguro que reservaré los comentarios de política local a ocasiones especiales, como la que se avecina con el mirador, la crisis y toda la parafernalia. He descubierto que me autocensuro y prefiero callarme a decir medias mentiras, a escribir para la galería o a que se malentiendan las cosas de grueso calibre que me salen de natural y que no he dicho; sin embargo eso supone para mí una pérdida que también tendré que resolver. De hecho si existiera un sitio web o un blog de debate local planteado con un mínimo de rigor, dirigiría mis reflexiones a ese sitio.
Para terminar, en algún momento me he sentido tentado de separar contenidos tan dispares, lo que con toda probabilidad vendría a significar repartir este en dos o más blogs temáticos, cosa que no me atrae porque sinceramente pienso que la blogosfera debería contraerse, garbillando blogs no actualizados y poco o nada visitados (glup, como el mío al menos de momento) y resumiendo contenidos no dependientes de la “creación personal” por blogs o webs en común más elaborados y respetuosos con las autorías (citando procedencias y en especial reconociendo paternidades) pero de momento seguimos. Tal vez en el siguiente cumpleaños.
Volvamos al meollo de la cuestión: me lo he pasado en grande y además estoy aprendiendo un montón de cosas nuevas casi cada día. Me ha animado mucho comprobar que tengo un público reducido (inevitable, dado el ámbito temático) pero fiel, según parece desprenderse de la estadística de conexiones. Puse el contador en abril y llevamos más de 2000 visitas. El calculo que hacen programas dedicados a evaluar la presencia en la red indica que el blog recibe un promedio de unas 10 visitas diarias. Así que aunque solo sean 10 las mismas personas que me visitan cada vez que escribo algo, vale la pena. Por cierto, sin hacer uso de triquiñuelas, he conseguido aparecer como la primera mención en google para dos entradas: “bibliografía ilicitana” ; “yporquenounblog”.
Jaja.
Pd.: Una curiosidad morbosa que nada tiene que ver: el Proyecto Palantir de Facebook
Gracias por pasar y a navegar.
Foto de Wikipedia
Hola Gaspar. Yo lo considero un blog estupendo y con rigor (cosa que escasea mucho en la red) y es una aportación interesante y muy digna. Lo principal es lo que has disfrutado, las visitas es secundario, pues las iniciativas realizadas circunscritas a la "cosa" local y además personales, cuesta mucho más esfuerzo, que se traduzca en números. Ten en cuenta que la divulgación de tu blog es casi "O" y la puedas tener es casi seguro por el "boca a boca". Cuando perteneces a un colectivo (también en la red), esa relación se ve recompensada, por lo que compartes. También destacaría de tu blog la constancia y determinación, máxime cuando me consta que te has tirado la primera vez de cabeza, a esta helada piscina de la blogosfera. Sigue adelante, el tiempo te dará la razón.
ResponderEliminarPor cierto existe un enlace que te permite saber las visitas promedio de cualquier web, blog, etc. Es bastante fiable y es una manera aproximada de saber las visitas de sitios a los que accedes con periodicidad. Te sorprenderás. Toma nota: http://www.statbrain.com